
Un estudio británico demuestra que los celulares pueden provocar más accidentes de tránsito que el alcohol. Según la investigación, los choferes que hablan por teléfono mientras manejan tienen reacciones más lentas que los choferes en estado de ebriedad. Por ejemplo, los conductores enfrascados en conversaciones telefónicas no podían mantener una velocidad constante ni guardar la debida distancia con otros automóviles.
1 comentario
jose -